
Revisión detallada de noticias del sector energético al 30 de agosto de 2025: sanciones y perspectivas de colaboración entre Rusia y EE. UU., caída de precios del petróleo, aumento de exportaciones de gas a Asia, crisis de combustible en Rusia y medidas del gobierno, tendencias regionales y desarrollo de energías renovables.
Sábado, 30 de agosto de 2025, se caracteriza por nuevos eventos en el complejo energético. La continuación de la prohibición rusa de exportar combustibles y el enfrentamiento de sanciones con Occidente están formando el contexto en los mercados de petróleo y gas. Los precios del petróleo a nivel mundial siguen presionados por un exceso de oferta y temores de una desaceleración de la demanda, mientras que en Rusia los precios de venta al por menor de la gasolina alcanzan récords, obligando al gobierno a tomar medidas de emergencia. A la par, se intensifica el interés por las fuentes de energía renovable y las innovaciones en el sector eléctrico. En este artículo, examinaremos las noticias y tendencias clave: desde la cooperación internacional en energía hasta la situación en el mercado interno de combustibles, además de un vistazo a las perspectivas de ingresos de hidrocarburos, cambios regionales y los enfoques hacia la energía “verde”.
Sanciones y cooperación: diálogo entre Moscú y Washington
A mediados de agosto, tuvo lugar una reunión en Anchorage (Alaska) entre los presidentes de Rusia y EE. UU., según la cual se discutieron vías de cooperación económica, incluyendo la energía. Aunque la cumbre entre Vladimir Putin y Donald Trump no culminó en acuerdos concretos, marcó la disposición de ambas partes al diálogo. Tras la reunión, el presidente Putin señaló que Rusia y EE. UU. tienen mucho que ofrecerse mutuamente en comercio y energía. Los expertos creen que, si hay voluntad política, el enfrentamiento por sanciones podría debilitarse, abriendo el camino para proyectos energéticos conjuntos.
«La lista de proyectos bilaterales potenciales en energía es extremadamente amplia: desde la extracción de petróleo en el mar de Kara y el mar Okhotsk hasta la importación de tecnologías para la producción de GNL y el suministro de petróleo ruso a refinerías estadounidenses que utilizan crudo con alto contenido de azufre. Las direcciones concretas dependerán de la velocidad del levantamiento de las sanciones y de la evaluación por parte de las empresas estadounidenses de las perspectivas comerciales a largo plazo en Rusia», afirmó el director general de Open Oil Market, Sergey Tereshkin, a la agencia RIA Novosti.
Así, en el contexto de la recuperación gradual de los contactos entre Moscú y Washington, surgen cautelosas esperanzas de un alivio de las sanciones en el sector energético. Sin embargo, en este momento, las medidas restrictivas siguen en vigor y la realización de grandes proyectos conjuntos solo será posible con su debilitamiento. No obstante, la continuidad del diálogo es una señal positiva para los inversores: a largo plazo, la presión de las sanciones podría disminuir, lo que permitiría reanudar la cooperación en áreas como la extracción de petróleo, tecnologías de GNL, energía nuclear y otros sectores.
Mercado petrolero global: precios bajo presión
El mercado mundial del petróleo muestra una tendencia a la baja. El precio promedio del Brent ha caído por debajo de $70 por barril en los últimos meses, lo que se acerca a los niveles mínimos desde 2020. En los primeros siete meses de 2025, el precio promedio del Brent fue de aproximadamente $72, mientras que el año anterior durante el mismo período superó los $84 por barril. La presión sobre los precios se debe a varios factores. En primer lugar, los países OPEP+ han aumentado su producción: desde abril de 2025, la alianza ha incrementado mensualmente sus cuotas, y solo en agosto-septiembre, el aumento colectivo de producción de ocho exportadores clave (incluyendo Rusia y Arabia Saudita) superó 1 millón de barriles por día. El aumento de la oferta ha llevado a un acumulamiento de reservas comerciales de petróleo en el mundo. Según la Administración de Información Energética de EE. UU. (EIA), se prevé que las reservas de petróleo en los países de la OCDE aumenten de 2,80 mil millones de barriles (para julio de 2025) a 2,94 mil millones para marzo de 2026 con la actual política de OPEP+.
En segundo lugar, la tasa de crecimiento de la demanda de petróleo está disminuyendo notablemente. La economía global está perdiendo impulso: los principales consumidores de energía están bajo presión. La administración Trump en EE. UU. impuso aranceles de importación contra varias grandes economías (UE, China, India), lo que enfría la actividad comercial. Según el último informe de la OPEP, en 2025, la demanda mundial de petróleo solo aumentará en 1,3 millones de barriles por día (frente a 2,6 millones de b/d en 2023 y 1,5 millones de b/d en 2024). Los temores de recesión y una oferta suficiente llevan a los comerciantes a prever una disminución adicional de los precios. Algunos analistas pronostican que en los próximos meses de 2025, el Brent se mantendrá en torno a $65-70, y en 2026, si las tendencias persisten, podría caer incluso por debajo de $50. Si bien tal caída dramática no es un pronóstico de consenso, los riesgos de un mercado “bajista” de petróleo han aumentado. Mucho dependerá de la geopolítica: cualquier acuerdo entre las grandes potencias o nuevos conflictos podrían invertir la tendencia de precios. En general, la actual coyuntura es favorable para los consumidores y requiere que las compañías petroleras mejoren su eficiencia y controlen los costos.
Sector gasístico: aumento de las exportaciones a Asia y dependencia de Europa
En el sector gasístico, continúa la reorientación de los flujos hacia el este. Según datos de Gazprom, entre enero y agosto de 2025, las exportaciones de gas natural a China aumentaron aproximadamente en un 28% en comparación con el mismo período del año pasado. Las entregas a través del gasoducto Fuerza de Siberia crecen de forma estable, acercándose a los máximos contractuales, lo que refleja el curso estratégico de Rusia de aumentar su presencia en el mercado de gas asiático. Pekín, a su vez, aumenta sus compras, sustituyendo los volúmenes perdidos de importación de GNL y reduciendo la generación a carbón para mejorar la ecología.
En Europa, la situación es opuesta: la dependencia del gasoducto ruso se ha reducido al mínimo debido a las sanciones y el enfrentamiento geopolítico. Sin embargo, la completa desvinculación energética ha resultado difícil. Ucrania, al rechazar las compras directas de gas a Rusia, se ha vuelto altamente dependiente de los suministros de reversa desde la UE. Esto ha llevado a un aumento de los costos del recurso y riesgos para su seguridad energética. El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, dijo recientemente que el cierre de las exportaciones de gas y electricidad de su país podría paralizar la economía de Ucrania en cuestión de días. Aunque Budapest no tiene intención de tomar tales medidas, sus palabras subrayaron la vulnerabilidad de Kiev. Según datos del sector, Ucrania importa la mitad de la electricidad que necesita de Hungría y Eslovaquia, y los volúmenes de gas almacenado para finales de verano fueron los más bajos en los últimos 12 años. Con la llegada del invierno, las necesidades de Ucrania respecto al gas han aumentado considerablemente, y se ve obligada a comprar combustible de emergencia a través de intermediarios europeos. Así, el sistema energético de Ucrania ahora depende de la buena voluntad y las capacidades de los países vecinos. A largo plazo, esto revive las discusiones sobre la fiabilidad del suministro energético en Europa: la UE busca acelerar proyectos de energías renovables y GNL para evitar una dependencia crítica, pero en el invierno más cercano, la región aún necesitará un récord de importaciones de gas, incluidas de manera indirecta, de Rusia.
Mercado interno de combustibles en Rusia: razones del aumento de precios y medidas del gobierno
El mercado interno de productos petroleros en agosto enfrentó una verdadera crisis de combustible. Los precios en las bolsas mayoristas de gasolina han alcanzado repetidamente máximos históricos. A mediados de agosto, en la Bolsa de Comercio de San Petersburgo, el precio de una tonelada de gasolina AI-92 superó los 72,500 rublos, mientras que el de AI-95 alcanzó los 80,000 rublos. En un año, la gasolina en la bolsa ha subido casi un 50%. El aumento de los precios mayoristas se refleja de inmediato en el ámbito minorista: a finales de agosto, el precio promedio al consumidor de la gasolina en Rusia ha aumentado aproximadamente un 6.4% desde principios de año, lo que supera significativamente la inflación (alrededor del 4.2% durante el mismo período).
Las principales razones de este aumento en los precios de los combustibles son:
- Demanda estacional y mantenimiento de refinerías. Los meses de verano tradicionalmente se acompañan de un aumento en el consumo de gasolina (turismo, trabajos agrícolas), mientras que varias refinerías estaban llevando a cabo mantenimiento programado. Esta combinación de alta demanda y disminución de la oferta ha llevado a una escasez de combustible en ciertas regiones.
- Factores de emergencia. Eventos extraordinarios han ejercido una presión adicional sobre el mercado: entre julio y agosto, varias grandes refinerías en el territorio europeo de Rusia se detuvieron forzosamente debido a ataques de drones. Por ejemplo, los incidentes en las bases de petróleo y terminales (Ust-Luga, entre otros) llevaron a pérdidas de crudo y a una pausa temporal en la refinación.
- Reducción de subsidios («amortiguador»). El mecanismo de amortiguación estatal, diseñado para suavizar los precios, ha estado funcionando menos eficazmente en 2025. Los pagos a los productores de petróleo desde el presupuesto han disminuido: solo en julio, el volumen de compensaciones cayó casi un 60% en comparación con el año anterior. Para las compañías petroleras, esto significa ingresos perdidos, que en parte compensan mediante el aumento de los precios en segmentos no estrictamente regulados (por ejemplo, el costo de la gasolina de alto octanaje en la bolsa no se considera para el cálculo del amortiguador, y su aumento ha quedado fuera de control).
- Logística y disparidades regionales. En regiones remotas hay una aguda falta de capacidad de almacenamiento y procesamiento de combustibles. En el Lejano Oriente, el precio de la gasolina es el más alto del país: en algunas áreas supera los 66 rublos/litro frente a aproximadamente 62 rublos/litro en promedio en Rusia. La lejanía de las principales refinerías y los costos de transporte adicionales obligan a las estaciones de servicio independientes a aumentar los precios. La diferencia de precios entre regiones ha llegado al 10-15%.
El gobierno está tomando medidas urgentes para estabilizar la situación en el mercado de combustibles. Desde el 21 de agosto, se ha impuesto una prohibición temporal de exportaciones de gasolina y diésel para los productores rusos, la cual inicialmente estaba en vigor hasta fin de mes. Ahora estas restricciones se han ampliado: se ordena a las compañías petroleras no exportar gasolina durante al menos hasta el 30 de septiembre, y a los comerciantes independientes hasta el 31 de octubre de 2025. El objetivo es saturar el mercado interno y frenar los precios especulativos. Además, los reguladores están preparando ajustes al mecanismo de amortiguación: se está considerando aumentar la desviación permitida de los precios de mercado de combustibles respecto al precio base establecido. El “límite” de aumento de precios para la gasolina AI-92 podría incrementarse del 10% al 15% (para diésel del 20% al 25%). Esto significa que, para el cálculo de las subvenciones de agosto, se aplicará un límite de precios más alto (alrededor de 69,5 mil rublos/t para AI-92), lo que permitirá a los refinadores recibir pagos incluso con los precios actuales en niveles récord y reducirá el incentivo de subir los precios aún más.
Además de las medidas financieras, las autoridades están aumentando los suministros operativos de combustible a las regiones problemáticas y manteniendo la situación bajo control. Según el Ministerio de Energía, se están enviando diariamente cisternas y camiones cisterna adicionales a las regiones del Lejano Oriente y del sur, que están experimentando escasez de gasolina. El gobierno ha recomendado a las autoridades regionales realizar labores de concienciación con la población para detener las compras de pánico. Los expertos esperan que ya en septiembre la situación comience a corregirse: finalizarán los mantenimientos en las refinerías, disminuirá la demanda especulativa del verano y habrá un excedente estacional de combustible en el mercado interno. El viceprimer ministro Alexander Novak declaró que a principios de otoño los volúmenes de producción de gasolina superarán las necesidades internas del país, lo que creará condiciones para estabilizar los precios al por menor. A finales de año, es probable que la tasa de aumento de los precios de la gasolina vuelva a estar dentro de los márgenes de la inflación o incluso por debajo (“inflación menos”). Sin embargo, el próximo año podría resultar complicado para las compañías petroleras: con un objetivo del Banco Central del 4% para la inflación, las posibilidades de aumentar los precios estarán limitadas, y la industria tendrá que mejorar su eficiencia para mantener la rentabilidad.
Petróleo ruso: exportaciones, reorientación y ingresos
A pesar de las sanciones y el embargo, el sector petrolero ruso muestra una relativa resistencia en los volúmenes de exportación. En la primera mitad de 2025, la exportación promedio diaria de petróleo de Rusia fue de aproximadamente 4,3 millones de barriles, que es solo un poco más bajo que el nivel de 2024 (4,8 millones de b/d) y comparable al de 2021 antes de la crisis (alrededor de 5,0 millones de b/d). Los mercados europeos perdidos se han sustituido completamente por los asiáticos: China e India ahora compran más del 80% de todo el volumen de exportación de petróleo ruso (para comparación, en 2022 su participación combinada fue inferior al 50%). Según el Ministerio de Energía, la exportación a países amigos continúa de manera estable, y la geografía de las entregas se ha desplazado: de hecho, Rusia ha encontrado nuevos compradores clave en lugar de la UE.
Sin embargo, el factor de precios ha reducido significativamente los ingresos al presupuesto. Debido a la caída del precio del petróleo ruso (el tipo Urals se negocia con un descuento de unos $10 respecto al Brent) y a la disminución general de los precios mundiales, los ingresos de hidrocarburos de Rusia han estado disminuyendo durante dos años consecutivos. Según las estimaciones de los analistas, en 2025 los ingresos totales del presupuesto federal del sector de hidrocarburos podrían disminuir aproximadamente en un 23% en comparación con 2024. No obstante, las perspectivas a medio plazo son moderadamente optimistas. Se espera que en 2026 haya una recuperación parcial: expertos de la empresa Kasatkin Consulting han pronosticado un aumento en los ingresos de hidrocarburos de aproximadamente el 19% respecto al nivel de 2025. Este pronóstico se basa en la suposición de estabilización de precios y aumento de los volúmenes físicos de exportación.
Los mismos actores del mercado mantienen la opinión de que lo peor ya ha pasado. Según el director general de Open Oil Market, Sergey Tereshkin, en la segunda mitad de 2025, los ingresos de hidrocarburos «alcanzaron el fondo» y se mantendrán cerca de los niveles actuales. El precio del petróleo ruso Urals, según él, difícilmente caerá significativamente por debajo de $50 por barril en los próximos años. Con base en un precio medio esperado del Brent de alrededor de $65 y manteniendo el descuento, se puede prever la estabilidad de los ingresos de exportación en la base actual. Por supuesto, mucho dependerá de la coyuntura: si OPEP+ continúa aumentando la producción y la economía mundial se desacelera más allá de lo previsto, los ingresos podrían estar bajo presión. Pero, por otro lado, el posible alivio de las sanciones o nuevos mecanismos de facturación (por ejemplo, venta de petróleo en monedas nacionales) podrían mejorar la situación de precios para Rusia. En resumen, el sector se ha adaptado a las condiciones de sanciones mediante la reorientación de flujos y ahora apuesta por mejorar la eficiencia. Mantener la producción en un alto nivel y desarrollar infraestructura en Siberia Oriental y el Lejano Oriente es la clave para que la exportación de petróleo ruso siga jugando un papel significativo en el mercado mundial, y que el presupuesto reciba ingresos estables (aunque moderadamente reducidos respecto a los años de pico).
Tendencias regionales: Kazajistán y nuevas rutas de exportación
En el espacio postsoviético se producen cambios notables en los flujos de combustible y materias primas. Los socios más cercanos de Rusia en la Unión Económica Euroasiática se están adaptando a la nueva situación del mercado, fortaleciendo la cooperación con Rusia. Así, Kazajistán aumentó las compras de productos petroleros rusos en más del 20% en términos monetarios en la primera mitad de 2025. Astana importa activamente gasolina y diésel de Rusia para cubrir la demanda interna, lo que está parcialmente relacionado con el mantenimiento de las refinerías kazajas y el deseo de contener sus propios precios. El combustible ruso ayuda a los vecinos a evitar escasez en las estaciones de servicio, especialmente en las regiones fronterizas.
Además, en agosto Kazajistán tomó la decisión estratégica de reorientar la exportación de su petróleo hacia las rutas rusas. Las autoridades petroleras del país anunciaron que desde agosto todo el volumen de crudo exportado de Kazajistán se enviará temporalmente a través del territorio ruso, utilizando el sistema de oleoductos CPC hasta Novorossiysk. Anteriormente, una parte significativa de las entregas se realizaba a través de una ruta alternativa a Azerbaiyán (a través del oleoducto Bakú – Tiflis – Ceyhan). La causa de los cambios fueron problemas técnicos: en la dirección mediterránea se detectó contaminación del petróleo con cloruros orgánicos (en el lote Azeri Light), lo que limitó la capacidad del oleoducto. La eliminación de las consecuencias de la contaminación puede tardar varios meses: es necesario limpiar el sistema y asegurarse de que la calidad de la materia prima cumpla con los requisitos de los compradores internacionales. Durante este tiempo, Kazajistán decidió apostar por la ruta probada a través de Rusia.
Los expertos señalan que la diversificación de las rutas de exportación es una práctica normal para Kazajistán, pero la situación de crisis ha mostrado las ventajas de la dirección rusa. «La ruta a Azerbaiyán es mucho más larga y costosa que el trayecto a través de Rusia», comenta Sergey Tereshkin sobre la situación. De hecho, el transporte a través de CPC es económicamente más ventajoso en condiciones estables. Así, la infraestructura rusa ha demostrado nuevamente su fiabilidad y flexibilidad: en circunstancias de fuerza mayor, los vecinos confían en el tránsito a través de Rusia. Además de petróleo, la cooperación en el sector eléctrico se está fortaleciendo: Rusia y Azerbaiyán discutieron en agosto la sincronización de sus sistemas energéticos y el suministro mutuo de electricidad para cubrir cargas pico y situaciones de emergencia. La integración regional en el sector energético continúa profundizándose, creando una red energética más resiliente en el espacio euroasiático.
Energía eléctrica y energías renovables: rumbo hacia la sostenibilidad e innovaciones
En el sector energético se observa una transición gradual hacia fuentes más sostenibles. El desarrollo de energías renovables (ER) en Rusia, aunque no avanza tan rápidamente, muestra un crecimiento estable. Según datos de la Asociación de Desarrollo de Energías Renovables, la capacidad instalada total de generación de ER en el sistema energético ruso alcanzó 6.64 GW al 1 de julio de 2025, lo que representa un 7.4% más que el año anterior. En la primera mitad de 2025, se pusieron en funcionamiento más de 0.45 GW de nuevos proyectos de energía solar y eólica. La mayor parte de las “capacidades verdes” (alrededor del 98%) se concentra en la parte europea y en los Urales (las primeras y segundas zonas de precios del mercado energético).
Al mismo tiempo, el estado está incentivando innovaciones tecnológicas para aumentar la fiabilidad del sistema energético. Según el ministro de Energía, Sergey Tsivilev, para finales de este año se planea poner en explotación sistemas industriales de almacenamiento de energía en el sur de Rusia. El uso de grandes baterías y sistemas de almacenamiento permitirá suavizar las cargas pico e integrar más generación de ER sin comprometer la estabilidad de la red. Este paso forma parte del rumbo hacia la digitalización y flexibilidad del sistema energético, que garantiza la seguridad energética incluso con una mayor participación de fuentes variables (viento y sol).
Mientras tanto, en el ámbito energético mundial, sigue la búsqueda de un balance entre los objetivos medioambientales y las exigencias de seguridad energética. Varios países, enfrentando déficit de gas, están aumentando temporalmente la producción en las plantas de energía de carbón, aunque simultáneamente están incrementando las inversiones en energía limpia. En Rusia, también crece el interés por reducir la huella de carbono: se están discutiendo proyectos de captura y almacenamiento de CO2, desarrollo de energía de hidrógeno, implementación de pequeños reactores nucleares modulares para regiones remotas. Todas estas iniciativas están dirigidas a asegurar que el sector energético nacional siga siendo competitivo en el contexto de la transición global energética. Por el momento, el petróleo, el gas y el carbón siguen siendo la base del balance energético, pero la participación de las fuentes de energía renovable sigue en aumento. El gobierno tiene como objetivo alcanzar una capacidad instalada de ER de aproximadamente 15 GW para 2030, más del doble del nivel actual. Así, el rumbo hacia la diversificación y sostenibilidad del sector energético continuará: nuevas tecnologías y proyectos “verdes” jugarán un papel cada vez más significativo junto a los hidrocarburos tradicionales.
Manténgase informado: nuestro canal de Telegram OPEN OIL MARKET
¿Desea recibir aún más información actualizada sobre eventos en el sector energético y reaccionar de manera oportuna a los cambios de mercado? ¡Únase a nuestro canal de Telegram OPEN OIL MARKET – el primer marketplace independiente de productos petroleros y materias primas en Rusia! En nuestro canal, se publican diariamente análisis exclusivos, noticias y comentarios de expertos sobre todos los segmentos del complejo energético. A nuestros suscriptores se les ofrecen:
- Análisis del mercado de hidrocarburos: noticias actualizadas sobre los precios del petróleo, gas, gasolina y otros productos petroleros, análisis de las decisiones de OPEP+, sanciones y medidas gubernamentales, pronósticos y tendencias para inversores.
- Marketplace de productos petroleros: información sobre ofertas ventajosas de compra y venta de combustibles, datos de comercio en bolsa, discusión sobre logística y financiamiento en el sector. Con OPEN OIL MARKET, es fácil encontrar compradores y proveedores de combustibles en toda Rusia.
- Comentarios y casos prácticos de expertos: opiniones de altos directivos de empresas de hidrocarburos, análisis de situaciones en los mercados de energía eléctrica, ER, carbón. Perspectivas prácticas para participantes del mercado de TKE de los países de la CEI.
Suscríbase al canal de Telegram OPEN OIL MARKET (@open_oil_market) para ser de los primeros en recibir noticias importantes y análisis de expertos. ¡Manténgase al tanto de las tendencias del sector energético y tome decisiones correctas con nosotros!
